Una partida promedio dura de 5 a 15 minutos y en ella TODO es posible: desde perder por un Piedra, Papel o Tijera hasta ganar por ser el más bajito; desde protegerte de agujeros negros y dragones hasta tropezarte por culpa de un puntero láser; desde tener que elegir si te tocas o no la nariz hasta ser víctima de una emboscada de gatitos recién nacido.